Debido a un proyecto de ley por implementar, aumentará todavía más la inflación, misma que ya había roto el récord financiero: los artículos de uso diario serán más caros para los estadounidenses con el menor poder adquisitivo.
La Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó un nuevo presupuesto de 3.5 billones de dólares a través del apoyo recibido por líderes progresistas a pesar de la oposición tanto Republicana como Demócrata moderada.
El proyecto de ley, que aumentará los impuestos a los estadounidenses y conducirá a una inflación aún mayor, amplía en gran medida los programas de la red de seguridad social que ya han sido ampliados en el último año debido a los programas de apoyo ante la crisis de salud mundial provocada por la COVID-19. La resolución preparará el escenario a finales de este 2021 para gastar aún más dinero en programas similares.
La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, obligó a nueve representantes demócratas moderados a votar por el proyecto de ley al retener la aprobación de otro proyecto mucho más pequeño, también de ley, no partidista, pero de infraestructura por la cantidad de un billón de dólares y que ya había sido aprobado anteriormente por el Senado debido a presiones por parte de los moderados. Los republicanos votaron de manera unánime en contra de este proyecto de ley de infraestructura. Explicaron que solo empeoraría el déficit de tres billones que enfrentan los Estados Unidos y que perjudicaría una inflación que ya ha roto el récord de gasto financiero. Este escenario aumentaría el precio de los artículos de uso cotidiano.
La congresista Young Kim comentó sobre los resultados de la pandemia en la nación, diciendo que “a medida que nuestra economía se recupera de la pandemia de la COVID-19, los estadounidenses de todo el país ven los aumentos de precios por todas partes. Desde la tienda de comestibles hasta la gasolinera. Nuevamente, los demócratas están pasando por alto el bipartidismo y avanzan con un presupuesto partidista de 3.5 billones de dólares a través de un proceso de reconciliación”.
La congresista Michelle Steel también expresó su preocupación ante la inflación porque teme que también sea el resultado del proyecto de ley de gastos que parece recalcar la siguiente idea: “llegó la hora de que el gobierno se salga del camino”.
