Tras el asesinato de un muchacho iraní, la Representante Young Kim ha sido una de las integrantes del Congreso más decidida a responsabilizar a Irán.
La Representante republicana Young Kim es la coautora de una resolución que condena los “asesinatos por honor” en Irán.
Esta resolución bipartidista fue redactada en respuesta al asesinato de Ali Fazeli-Monfared, un joven iraní, gay, de veinte años. Fazeli-Monfared, según representantes del grupo de la defensa de los derechos de la comunidad LGBTQ iraní, fue asesinado por miembros de su propia familia en mayo, después de que se descubriera que había recibido una exención del servicio militar por su orientación sexual.
La resolución 497 de la Cámara de Representantes presentada por Young Kim y el congresista demócrata David Cicilline de Rhode Island, calificó el asesinato de Fazeli-Monfared como “un crimen aborrecible que debe investigarse a fondo y enjuiciarse, plenamente”. Se refiere a los “asesinatos por honor” como “una violación de las normas internacionales de los derechos humanos”. Además, la resolución solicita a los Estados Unidos y a los gobiernos aliados que condenen públicamente los abusos contra los derechos humanos en Irán y que apoyen los esfuerzos que documentan los “asesinatos por honor” en Irán.
Este movimiento de la Representante Kim aparece inmediatamente después de varias de sus más recientes acciones en apoyo a los derechos humanos, así como sus declaraciones en contra de prejuicios e intolerancias. A principios de este mes, Kim firmó una carta en la que pidió la destitución de la Representante Ilhan Omar de sus asignaciones en el comité, basándose en un historial de repetidos comentarios antisemitas.
Kim también apoyó de manera firme a Israel en el reciente conflicto en la Franja de Gaza y sus alrededores. Pidió la paz para Israel y recalcó el derecho de aquel país a la autodefensa. Más recientemente, Kim ha condenado a Ebrahim Raisi, el actual presidente electo de Irán, a quien múltiples organizaciones internacionales lo han condenado por sus atentar en contra de los derechos humanos.
